Por medio de su cuenta de Twitter, el ministro de Defensa, Diego Molano Aponte, informó en la tarde de este sábado 8 de mayo que las autoridades colombianas pudieron dar captura al hombre conocido como alias ‘Lerma’, presunto cabecilla urbano del Ejército de Liberación Nacional, ELN, acusado de instigar los actos vandálicos registrados en Cali durante los 11 días de Paro Nacional en contra del Gobierno de Iván Duque.
“En el marco de las operaciones que desarrolla nuestra fuerza pública para garantizar recuperar el orden y la tranquilidad para la ciudad de Cali, en el día de ayer, gracias a una operación conjunta entre nuestra Policía Nacional y en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, se capturó a alias ‘Lerma’ cabecilla del frente urbano del ELN en Cali, presuntos responsables de varias de las actividades de atentados contra nuestros policías”, reportó el funcionario.
De igual manera, lo asoció con ataques contra los bienes públicos y los desórdenes que se viven en la ciudad desde el pasado 28 de abril. A causa de los mismos hasta este viernes se contabilizan, sólo en la capital vallecaucana, por lo menos 15 personas fallecidas, 450 lesionados, 42 estaciones del Sistema MIO atacadas, 30 estaciones de servicio de combustible dañadas y 54 establecimientos comerciales vandalizados, según el reporte del alcalde Jorge Iván Ospina.
En el proceso de captura, continuó Molano, “se le encontró un arma no letal, modificada, con explosivos, con el fin de generar daño a la sociedad y después inculpar al Esmad y a la policía” de actos contra la población civil. También portaba, agregó, una granada que se disponía a detonar en medio de una protesta.
Por su parte, el director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas Valencia, quien explicó que el capturado estaba bajo las ordenes del cabecilla del frente José María Becerra, con quien se reunió hace tres días en un campamento para recibir dinero y armas “menos letales” del Esmad, modificadas con explosivos y metralla para hacerlas más peligrosas. De allí se dirigió hacia Cali, presuntamente para seguir organizando actos vandálicos en el marco de las protestas.
“Mediante la vigilancia, seguimiento, las labores de campo, los elementos materiales de prueba y evidencia física, se determinó que en sitios clandestinos del barrio Siloé y El Vallado, donde se capturó, se reunía con venezolanos y con grupos delincuenciales de la ciudad para generar caos, actos contra las personas, los bienes públicos, el comercio, para atentar contra los policías y soldados que están garantizando la seguridad en la ciudad de Cali” agregó Vargas.